La concentración de hospitales en la capital del país dejó al descubierto la vulnerabilidad del sector, tras los sismos de 1985: en un solo día se perdieron más de cuatro mil camas. Después de décadas de predominio del modelo basado en la concentración urbana y hospitalaria de la atención, con el Programa de Reconstrucción de los Servicios de Salud se resolvió que, parte de la infraestructura a reconstruir, se haría fuera de la Ciudad de México. Así, la tragedia dio paso a la descentralización no sólo del sector salud, otros organismos gubernamentales que tenían su sedes en las zonas afectadas también migraron de la capital.
En materia de cultura, la descentralización inició a finales de la década de los ochenta y principios de los noventa, cuando el INAH y el INBA comenzaron a entregar paulatinamente la administración de la cultura a los estados. Es entonces que surgieron los organismos estatales de cultura, que promueven la creación de nuevos centros culturales y museos en varias ciudades del país. El propio crecimiento de algunas ciudades medias también ha detonado la descentralización de servicios de sus zonas centrales a las periferias, con la consecuente creación de nuevos edificios.
Hospital de Oncología-Centro Médico Nacional Siglo XXI
Auditorio Municipal Mariano Abasolo
Teatro de la Ciudad de Aguascalientes
Secretaría de Relaciones Exteriores
Unidad Médica Quirúrgica Intermedia
Unidad Médica de Atención Ambulatoria
Centro de Tratamiento y Rehabilitación para Adictos
Hospital General Tipo “A” de La Paz
Centro de Salud Urbano y Oficinas Jurisdiccionales
Museo Laberinto de las Ciencias y las Artes
Centro de Investigación de Recursos Genéticos
Centro de Arte y Cultura Reynosa